domingo, 25 de enero de 2015

XXXV. Idazabalgo Herri Krosa

Beñat Arnaiz y Aser Cuevas
Mucho y bien había oído hablar de esta carrera, una de las pocas clásicas -va por la 35ª edición- que todavía no había catado. Y ya era hora de hacerlo, antes de entrar en la tercera edad. La prueba discurre por un circuito urbano al que hay que dar tres vueltas, en un constante subir y bajar por pendientes casi imperceptibles y con subidas que pican de verdad, hasta completar 10.245 metros, perfectamente medidos y señalizados.

Hemos tenido suerte con el tiempo, ideal para correr, sin apenas viento y con una temperatura ligeramente por debajo de los 10º.

Se ha dejado notar la ausencia de muchos de los mejores fondistas gipuzkoanos que corrían a la vez en Elgoibar, peleando por terminar el cross sin ser alcanzados por la marea negra, pero de eso ya hablaremos a lo largo de la semana.

Hoy toca hablar de una carrera que me ha cautivado por la organización, cuidando detalles como el aparcamiento. He salido de casa dejándome la ropa y me he dado cuenta cuando enfilábamos la N-1. Vuelta y más de veinte minutos perdidos. Hemos llegado pasadas las 11:30 y hemos aparcado a la primera, a la altura del km. 9, gracias a los buenos oficios de los voluntarios. También me ha gustado el circuito. A mí me van mejor los completamente llanos, que me permiten mantener una velocidad de crucero, pero éste tiene su punto, te mantiene la tensión y no te da ni un minuto de respiro. Me encanta correr acompañado, ganar posiciones o defenderlas. He llegado en el puesto 250º y he ido siempre en carrera, perdiendo posiciones al principio y ganando alguna a medida que avanzaba la carrera.

Juanjo Igarzabal y Asier Cuevas
¡Que decir de la inscripción! Sólo 5 €. No dan ninguna camiseta, pero a Iñigo y a mí nos ha tocado un queso de Idiazabal y casi todos los atletas salen con algún regalo. Y el ambiente, el público, realmente extraordinario. No me imaginaba recibir tantos ánimos, incluso llamándome por mi nombre, en un pueblo que sólo recuerdo haber visitado un par de veces.

Ha ganado Asier Cuevas (32:54) por delante de Beñat Arnaiz (33:14) y Mikel Albeniz (33:43), que ha alcanzado el podium en una apretada llegada con Juanjo Igarzabal (33:44), un clásico de esta carrera, y Ángel Vázquez (33:45). Martín Fiz, campeón del mundo de maratón hace 20 años (¡cómo pasa el tiempo!) en Goteborg, ha sido sexto en 33:51. 

A otro nivel, Miguel Angel Encina (34:43), Diego Calderón (34:59), Jon Garate (35:00) y Víctor Madejón (35:03), han completado el top ten.

El podium de las chicas
En cuanto a las chicas, tres veteranas han copado el podium, por delante de las otras 70 mujeres que se han clasificado. Izaro Rubio, que está disfrutando de un gran momento de forma, ha sido la primera en 38:50. Lourdes Colomo (40:16) ha sido segunda y la simpatiquí-sima Estela Biain (41:48), que me ha reconocido, abordado y saludado nada más llegar a la meta, ha llegado en tercera posición.

He tenido oportunidad de conocer y saludar a muchos seguidores de este blog, que debe su pervivencia a quienes tienen la paciencia de leer lo que con la única pretensión de disfrutar voy escribiendo.

Como Josemi Bastardo, a quien he alcanzado en el último kilómetro, me ha reconocido, saludado y animado y con quien he ido haciendo la goma, hasta disputar un sprint a cara de perro, resuelto casi en el último metro. Lo cortés no quita lo valiente ¿verdad? 

A todos ellos les pido que tengan un poco más de paciencia. Entre mañana y pasado, prometo mencio-narlos. 

Permitidme que por hoy termine ¡cómo no! con datos y gráficos de participación, que confirman a la popular de Idiazabal en el entorno de los 600 atletas, incluso con la competencia del Cross Internacional de Elgoibar, con una clientela fiel, entre la que me cuento desde hoy.

Quienes no la conozcáis apuntadla en la agenda de enero de 2016.

1 comentario:

  1. Gabi, solo la he hecho una vez, en 2011, pero comparto totalmente tus impresiones; mucho cariño organizativo, desde el ambiente, la marcación de kms, la cantidad de premios por sorteo (volví con medio queso, media docen de huevos, botella de sidra, etc), las facilidades de aparcamiento, ducha, la moderación en el precio de inscripción, etc.

    Un gran recuerdo, a ver si el año que viene volvemos.

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